pero no pasa nada

Amaia, uno de los éxitos (podría decirse) más justificados del fenómeno Operación Triunfo ha sacado finalmente su primer álbum de estudio.

Saliendo de Eurovisión con bastante más pena que gloria, Amaia corría el riesgo de acabar siendo vagamente recordada. De los artistas más tardíos en presentar su música en comparación con sus compañeros de la academia, queda patente el trabajo que ha habido de preparación y producción.

Sin embargo, este trabajo resulta bastante cuestionable. Echando un vistazo a un buen número de proyectos salidos de la academia de Operación Triunfo, vemos cómo los cantantes se moldean a medida que van lanzando su carrera individual, definiendo de manera muy clara su carácter y su estilo. Como si fueran cromos, estos cantantes se convierten en targets vivientes tremendamente acotados para bien de sus seguidores.

Amaia parecía una de las escasas artistas que podía romper con esta dinámica. Con aire de persona poco común y una personalidad francamente particular, hubiéramos apostado por las mayores rarezas dentro de su producción. Así lo auguraba, por ejemplo, su primer lanzamiento junto a Carolina Durante. Por el contrario, nos plantamos frente a un proyecto totalmente prototípico y con la personalidad de Amaia totalmente diluida en un mar de targets y objetivos discográficos.

Pero No Pasa Nada tiene ciertos detalles agradables. Las letras, muchas veces entre poco serias y comunes, sí que encajan con la personalidad de una chica que bebe de muchas ideas y que a veces recuerda en cierta manera a Movida Madrileña (“Quiero que vengas / o voy yo / ya voy yo” o “La guitarra suena un poco mal / pero no importa porque es verano”). La cotidianeidad unida al intimismo del relato y voz conjugan de manera ideal. No ocurre igual con los instrumentales, tremendamente genéricos y sencillos, totalmente carentes de profundidad. Guitarras, piano y algún sintetizador en este caso no bastan para completar canciones que suenan a Karina y a lo más sencillo del pop español.

Hay espacio para las excepciones. Quedará en nuestra mente acierta con claridad. No sabríamos explicar exactamente cuál es el motivo de que esta canción sí nos guste y otras no, pero la realidad es que algo, sobre todo en el apartado armónico, nos suena muy bien. Tampoco diríamos con convencimiento que este sea el camino a seguir para la artista, pues el álbum se compone de 8 canciones más repitiendo la misma idea y haciendo ciertas variaciones. Tendremos que conformarnos con una opinión relativamente irracional.

Aparte de este tema, hacer un mayor análisis de canciones resultaría poco útil. Amaia se deshace en un estilo dulce y dirigido a resultar adorable, pero que difícilmente es consumible en el día a día. Sabemos que la artista puede ser mucho más atrevida e irreverente. Resumiendo: sabemos que puede ser una artista. Hasta que retome ese camino, esperaremos.

Amaia – Quedará En Nuestra Mente

Por KUBO

La redacción del Kubo Musical es llevada por Miguel Vico. Porque aspiramos a mucho más: imagina, descubre, comparte.