
Si hablamos de nombres propios dentro de la música electrónica del momento, el nombre de DJ Snake brilla con luz propia. Después de un primer álbum de matrícula de honor, su capacidad para crear éxito tras éxito renovando sus fórmulas le merece recibir el mayor respeto por parte del público. Su ingenio ha seguido renovándose durante los dos últimos años y, persiguiendo los nuevos géneros más bailados (fundamentalmente el reggaeton), ha dado una vuelta de tuerca a su segundo disco.
Sin embargo, hablar simplemente de reggaetón es hacer una descripción muy pobre de los intereses del parisino. Su disco aúna su gran pasión por los sonidos más sucios de la electrónica con influencias venidas de la India, África y sin dejar de lado el Hip Hop Americano que tanto disfruta.
Carte Blanche repite la fórmula de Encore, su primer álbum, haciendo un proyecto ecléctico y variado.
Pero a diferencia de éste, aquí da la sensación de que este eclecticismo no consigue ser tan disfrutable. Con Taki Taki y Loco Contigo como temas insignes del proyecto, muchos temas quedan relegados a un segundo plano, algo que no pasaba en este primer álbum.
En este sentido, este segundo álbum falla en algo que resulta fundamental: la cohesión. Sus temas tienen calidad pero se desarrollan más como un popurrí que como un camino a recorrer. Verdaderamente decepcionante sobre todo después de escuchar el comienzo del álbum, debido a que después de un tema introductorio como Butterfly Effect la transición al segundo tema es simplemente de genio. Abrupto y repentino, Quiet Storm (colaboración con Zomboy) toma la palabra para mostrar al Snake más alocado. Bien es sabido que el artista siempre deja espacio en su discografía para varios temas que traten de incidir en el brostep y en el house más sucio.
A lo largo del trabajo podemos encontrar bastantes temas dignos pero con poca personalidad. Con grandes colaboraciones como la realizada con ZHU o el equipo de Pardon My French, la sensación es más de hablar de temas de estantería que de auténticos exitazos. Enzo es todavía más decepcionante, un tema que aspira a ser éxito pero que se queda en puro aburrimiento, realmente el peor tema del álbum.
Por otro lado, el artista completa su adentramiento en el reggaetón con un tema con Sean Paul y Annitta. Fuego es un tema que suena igual de bien que sus dos hermanos mayores y que revela que el artista ha estado agraciado a la hora de inspirarse para componer estos temas. Magenta Riddim se desmarca ya de esta tendencia pero es, sin lugar a dudas, uno de los mejores temas del proyecto. Con año y medio de vida ya a sus espaldas, el potente tema venido de la India no ha envejecido ni un poco.
Mi apuesta personal va por un tema que probablemente disfrutará de poco reconocimiento, pero que aquel que sepa disfrutarlo alucinará. Agresiva e imaginativa como pocas, Frequency 75 es simplemente brutal, pocos calificativos más pueden definir una de las mejores producciones de música electrónica en lo que va de año. El segundo drop del tema es simplemente un viaje por los entresijos más desagradables de la mente del francés, sonidos de película de miedo que rápidamente se disipan para dejarnos con ganas de volver a atravesar el túnel del terror.
No Option resulta un souvenir más de África de la mano de Burna Boy. Cada vez escuchamos más temas con influencia de este continente, pero empiezo a cuestionarme si se trata realmente de la introducción de nuevos sonidos en nuestro repertorio musical o simplemente se trata de un recurso simple de ciertos artistas para intentar ser más exóticos y originales. A pesar de que DJ Snake siempre ha destacado por su virtuosismo con los sonidos exóticos, No Option no acierta.
Carte Blanche es notable, ciertamente se trata de un gran álbum, pero no está a la altura de su predecesor. A pesar de que las comparaciones son odiosas y de que las circunstancias en que ambos álbumes vieron la luz no son asimilables, no podemos negar que este álbum saca mucho partido del trabajo ya adelantado, es decir, de los sencillos. Porque Encore también contenía los grandes éxitos del artista, pero eso no restaba valor al resto de las composiciones. Sin embargo, si algo hace bien DJ Snake es dejar con ganas siempre de más. Aunque falle en ciertas cosas, el álbum demuestra que el artista continúa a un grandísimo nivel y da pruebas de que solo el tiempo dará cuenta de lo que es capaz uno de los maestros de maestros.